Las fotos no son palabras, pero hablan.
Las fotos son el alma del hombre.
Las fotos fluyen como un río,
mientras en el silencio el arroyo gorgotea.
Las fotos no son rayos, pero relampaguean.
Las fotos no tienen vida, pero existen.
Las fotos no son canciones pero cantan,
y a nadie por nada acusan.
Las fotos no son Dios, pero perdonan.
Las fotos no son jueces, pero juzgan.
Las fotos son realidad e imaginación,
son un esquema de naturaleza y gente.
Las fotos siempre fueron fotos.
Las fotos se acercan y se pierden.
Las fotos sonríen y lloran,
fruncen el ceño, y te besan.
El poema original acá.
Traducción: Myrna Katherine Darda.